Acerca de esta categoría
El jazz femenino alcanzó alturas inmortales gracias a voces únicas. Ella Fitzgerald, la “Primera Dama del Jazz”, sorprendió con su scat improvisado y afinación impecable. Billie Holiday transmitió dolor y ternura con su inconfundible timbre en canciones como Strange Fruit. Sarah Vaughan impresionó con un rango vocal amplio y una calidez envolvente. También Nina Simone llevó el jazz hacia terrenos de protesta y libertad, mientras Diana Krall sigue encantando con su estilo sofisticado al piano. Los sonidos característicos incluyen contrabajos caminantes, baterías con escobillas, saxofones sensuales y trompetas brillantes que acompañan cada matiz de la voz. El jazz vocal femenino es conversación, improvisación y emoción. Cada nota cuenta una historia íntima, cada frase acaricia o sacude el alma. ¡Imagina un club pequeño, aplaude con suavidad y deja que estas voces eternas te envuelvan con su magia!